Opinión

El futuro del empleo es femenino

Por Roberto Matosas

Visión femenina para afrontar el futuro del empleo con optimismo inteligente


He estado leyendo el libro  ‘Il futuro del lavoro è femmina’ (El futuro del empleo es femenino) de Silvia Zanella, Head of Employee Experience del área mediterránea de EY, especialista en marketing de RR HH, periodista y formadora. 

El libro comienza con esta aseveración: “Il futuro del lavoro è femmina. Non donna, femmina” (El futuro del empleo es femenino. No de las mujeres, femenino”. Una distinción importante, porque lo femenino (el Liderazgo femenino, por ejemplo) es de género, cultural. Una forma particular de comportarse, de influir en los demás, desde el respeto, la empatía, la cooperación, el desarrollo mutuo. El sexo (mujer u hombre) es biología, cromosomas XX y XY. 

El futuro del empleo es femenino porque las competencias requeridas lo son. Así de simple. Estos no son los tiempos de la cadena de montaje, del “ordeno y mando”, del macho alfa, de la imposición. Son los de la “modernidad líquida” (Zygmunt Bauman), de los valores y el propósito. Caída demográfica (en la UE en 2018, más fallecidos que nacimientos), tecnología (acelerada por el covid 19), smart working (concepto que ha triunfado en Italia), directiv@s que deben ser líderes-coaches y no capataces, soft skills (un servidor prefiere llamarlas “competencias de compañerismo: autoconfianza, serenidad, empatía, orientación a resultados, trabajo en equipo). “Entrena habilidades, contrata por actitud” (Simon Sinek). 

Los trabajos ya no son “puestos”. L@s profesionales son BYOD (Bring Your Own Device, Tráete tu Propio Dispositivo). Coworking y nueva geografía del empleo (“talent shortage”, escasez del talento), diversidad e inclusión, virtualización de los equipos. Era de proyectos y medición del rendimiento de una forma mucho más avanzada. 

Cambia el tiempo, cambia el espacio, cambian las relaciones (“organizaciones flat” llaman en Italia a la alternativa a la burocracia tradicional) en el futuro del empleo. Liderazgo participativo, especial énfasis en la “employee experience” (experiencia de talento), ecosistemas de colaboración. 

La identidad: ¿Qué quieres ser “de mayor”? Marca, puesta en valor, predisposición adaptativa en tiempos megaVUCA. De lo que hago a lo que soy: un/a intraemprendedor/a. La clave está en aprender, en transformar el curriculum (exhibición de trofeos del pasado) en tu “Personal Branding” (tu huella). 

Me han gustado especialmente, en las conclusiones, las 10 reglas de navegación que nos ofrece Silvia Zanella:

  1. De la Rigidez a la Flexibilidad.
  2. De la Competición (interna) a la Colaboración. 
  3. Del Centramiento (silos) a la Comunicación.
  4. Del Control a la Confianza.
  5. De la Coerción al Consenso.
  6. De la Infalibilidad a la Vulnerabilidad.
  7. De la mera Ejecución a la Responsabilidad.
  8. De la Exclusión a la Diversidad.
  9. De lo Autoreferencial (yo, mi, me, conmigo) a la Empatía.
  10. De la Acción individual al Ecosistema (plataforma).

Visión femenina para afrontar el futuro del empleo con optimismo inteligente. Gracias, Silvia Zanella, por este enfoque que comparto sin fisuras.