Opinión

El Código de la Inspiración

Por Roberto Matosas

La inspiración es un círculo virtuoso porque se trata de la conexión, cara a cara o en reuniones.


 Cómo l@s mejores líderes energizan a su gente cada día’ de Kristi Hedges. La autora es una colega coach, experta en Liderazgo, autora de ‘El poder de la presencia’.

El Modelo que nos ofrece Kristi Hedges ofrece cuatro P:

  • Presente: A) La Atención es un regalo.
  • Se trata de dedicar tiempo de calidad. Estar presente cambia la conversación. La distracción tiene un precio (elevado). Aprendamos el poder de las pausas, el de la curiosidad y el de expresar lo importante. Mostremos una comunicación no verbal receptiva.
  • B) Las historias que nos contamos mientras nos despedazamos. Reflexión, prueba y error. Cuando vemos a personas sobrepasadas, solemos distanciarnos de ellas por instinto; deberíamos mostrarnos abiert@s y generos@s. Para arriesgarnos necesitamos esperanza, confianza y positividad. No podemos cambiar nada si no lo aceptamos primero. Para y reinicia, céntrate y respira, descansa un poco, cambia de sitio y céntrate en la gratitud. ¿Cómo quieres que se sienta la audiencia?
  • C) Engañar al cerebro para abrir la mente. Nuestro pensamiento se calcifica con el éxito y la experiencia (dogmatismo). Con el sano propósito de la eficiencia, el cerebro crea sesgos. La autora repasa los seis elementos de la Influencia, de Robert Cialdini, comentados en este Blog en otras ocasiones. Inspiremos con apertura mental, escucha honesta y reconociendo cuando no tengamos respuestas.
  • Personal: de ti a mí.
  • A) Primero, que sea real. Un alegato riguroso por la Autenticidad. “Admiramos a quienes son reales, dicen la verdad y hablan desde el corazón”. Esto cuesta porque nunca somos 100% auténtic@s. Es un rasgo tanto externo como interno. Conoce tus valores y determina tu identidad. Abraza tu historia de liderazgo. Domina tu mensaje. Explicita la transparencia, desde un lenguaje genuino. Expresa tu vulnerabilidad. Recibes tanta autenticidad como entregas.
  • B) Eleva la mirada hacia tu potencial. Reconoce el potencial en los demás y conversa sobre ello. Es el “efecto Pigmalión” (Robert Rosenthal). Cuando mostramos el potencial, fortalecemos la confianza. Los “superjefes” son multiplicadores de talento.
  • C) La influencia silenciosa de la escucha. La escucha atenta es una inversión emocional. En muchas conversaciones se pierde el contexto. No escuches palabras, sino a la persona en su conjunto.
  • Pasión: Pon tu corazón y tu energía.
  • A) La energía es contagiosa y es la forma más visible de la pasión. Calibra la energía de tu entorno y elévala.
  • B) Mueve el corazón antes que la mente. Somos seres emocionales y así mostramos nuestra humanidad, comunicando con energía. Cuando mostramos nuestras emociones, permitimos que los demás las compartan. Somos emocionales aunque tratemos de no serlo. Aristóteles lo dijo antes que nadie: ethos, pathos, logos. Habla con palabras emotivas y cuenta buenas historias.
  • C) Dilo como si lo sintieras. L@s líderes deben mostrar convicción. Empieza cuestionando lo que piensas. Cuando tu mente habla, tu cuerpo escucha (y al revés). Sonríe, si es posible.
  • Propósito. A) Conversaciones llenas de propósito. El propósito es la chispa que nos inspira. ¿Cuál es el propósito del propósito? Trascendencia, evocación y motivación. El propósito es motivación intrínseca. El propósito tiene dirección y se mueve hacia adelante.
  • B) Si no lo usas, no lo compartes. Si no te dejas inspirar, no inspirarás a los demás. Sé un “role-model”, enciende tu propósito y asume riesgos.
  • C) Llamada al coraje. Necesitamos líderes con carácter. Son tiempos para valientes. Coraje para priorizar el propósito.

En conclusión, la inspiración es un círculo virtuoso (su falta, un círculo vicioso) porque se trata de la conexión, cara a cara o en reuniones.

Mi gratitud a Kristi Hedges por este libro.

 

fuente: Juan Carlos Cubeiro, Tecno Talento, junio 15.2023