Cinco días antes del Día de Muertos, una de las celebraciones más importantes del País, quedó listo el altar que el Ayuntamiento de Veracruz instaló en Palacio Municipal.
En los bajos del recinto, justo sobre la escalera que da hacia el zócalo de la ciudad, se acondicionó el espacio en el que resalta el color amarillo y morado que distingue a estas fiestas.
Se trata de siete escalones; cada uno de ellos con fotografías de colaboradores y personajes emblemáticos veracruzanos quienes se adelantaron en el camino.
Veladoras, calaveritas, comida (tamales, mole, refresco, chocolate, frutas, dulces y pan de muerto) canastas, floreros y guirnaldas de papel picado son parte de la decoración.
En la cima una imponente cruz que posa sobre la letra "V" de Veracruz, ambas adornadas con la tradicional flor de cempasúchil; a los costados fueron colocadas otras dos figuras.
Las puertas han sido forradas de palma camedor; en cada una de las partes un canasto que simula estar derramando guías de flores amarillas.
El altar de muertos estará abierto al público en general para que turistas y locales acudan a tomarse la fotografía del recuerdo.