Opinión

Reforma a las pensiones

Por Martín Orozco Sandoval

No se vale el manejo irresponsable, maquiavélico y político de este tipo de iniciativas


Durante la conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el 5 de febrero enviará su iniciativa de reforma al sistema de pensiones de los trabajadores mexicanos.

El presidente ha comentado que esta reforma tiene como objetivo que cada trabajador reciba una pensión digna, lo cual es muy loable, sin embargo, esta propuesta tiene sus riesgos.

Estando en periodo electoral el enviar este tipo de iniciativas puede entenderse como parte de su estrategia electoral para alcanzar un triunfo y la mayoría constitucional en el Congreso.

La iniciativa busca que los próximos jubilados reciban como mínimo el sueldo que tenían cuando estaban en activo, esto quiere decir que recibirían lo mismo que ganaban antes de su retiro.

Sin embargo, ante la debilidad de las finanzas públicas una propuesta como esta genera mayores presiones y un costo fiscal enorme ya que actualmente el ahorro individual no sería suficiente para cubrir el 100% del salario una vez pensionado el trabajador.

Una de las alternativas para lograrlo sería un incremento sustancial a las aportaciones patronales y de los trabajadores a la cuenta individual de ahorro para el retiro. Cabe hacer notar que actualmente los trabajadores tienen la opción de realizar aportaciones voluntarias para incrementar el monto de su jubilación.

La otra opción es eliminar el esquema de ahorro individual y regresar a las condiciones que se tenían antes de 1997, con un sistema de retiro con beneficio definido al margen de las aportaciones de los trabajadores.

En este sentido el riesgo fiscal puede ser enorme e inimaginable para el gobierno federal y sus finanzas.además de lo anterior, se generaría una crisis de confianza, ya que sería el gobierno el que maneje los más de 5.8 billones de pesos de los ahorros de los trabajadores lo cual podría generar inquietud de cual sería el destino de estos.

Ya anteriormente a la creación del sistema de ahorro para el retiro con cuentas individuales, el IMSS era el administrador único de los fondos para el retiro de los afiliados al Instituto, y fracasó.

Para el gobierno federal en estos momentos en donde requiere recursos adicionales para sus gastos es muy tentador el poder administrar el monto ahorrado por los trabajadores mexicanos para usarlo en gasto en infraestructura como el Tren Maya o la refinería de Dos Bocas, para programas sociales o pagar deuda de corto plazo que esta próxima a vencer.

No se vale el manejo irresponsable, maquiavélico y político de este tipo de iniciativas. Debe de ser denunciado por los partidos de oposición, las organizaciones sindicales, los propios patrones y trabajadores para que realmente hagamos reformas que puedan dar certeza financiera al país y a las familias de cada uno de los trabajadores mexicanos.