Uno de los capítulos más grandes en la historia de México se sitúa en 1862, cuando los ejércitos de México y Francia protagonizaron la Batalla de Puebla; la importancia nace por tratarse de una de las pocas victorias que se ha logrado ante un ejército extranjero invasor.
La Batalla de Puebla ocurrió el 5 de mayo de 1862, después de que el presidente Benito Juárez proclamara la suspensión del pago de la deuda externa.
En ese momento, los países adeudados (España, Inglaterra y Francia) declararon la guerra a México. Después, Juárez llegó a un acuerdo con dos de las potencias, pero Francia estaba decidida a invadir.
Entre los aspectos que más llama la atención en la historia, es que el Ejército mexicano resulto victoriosa a pesar de tener en sus filas un gran número de combatientes inexpertos, los cuales estaban acompañados de un número reducido de soldados enviados por el presidente Benito Juárez.
Las fuerzas del ejército mexicano eran comandadas por los generales: Ignacio Zaragoza, Miguel Negrete y Porfirio Díaz.
Cabe indicar que el general Ignacio Zaragoza es considerado como el héroe nacional, constructor de la patria, defensor de la soberanía y vencedor contra el ejército invasor; quien murió tiempo después.
Cabe señalar que la Batalla de Puebla suele confundirse con la Independencia de México, el acontecimiento cobra significación para la comunidad migrante en Estados Unidos, donde desde 1967 se honra la memoria de Ignacio Zaragoza, originario de Texas.
Fuente: Gobierno de México