Opinión

¡Ahora sí!

Por Artillero / Moisés Hernández Yoldi


Finalmente y luego de agotarse todas las instancias legales, Veracruz tiene alcaldesa electa.

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) validó la elección y ratificó el triunfo de Patricia Lobeira de Yunes. Con esta decisión llega a su fin un largo proceso en donde se pusieron a prueba a las instituciones, mismas que respondieron actuando apegadas a derecho. México vive un momento estelar en su democracia, un momento donde los tres poderes actúan de manera independiente y con autonomía; lejos quedaron aquellos días en los que el ejecutivo sometía a jueces y magistrados. La resolución del TEPJF es una muestra de ello, el triunfo del grupo yunista en Veracruz responde a la voluntad de los veracruzanos, pero también a la irrestricta actuación de jueces y magistrados. Se abre una nueva etapa para Veracruz, una nueva administración iniciará el 1 de enero y enfrentará grandes retos, de inicio hay tres temas que deberá atender de inmediato: 1.- Revisar el contrato de concesión del agua que otorgó Ramon Poo y atender los abusos por parte de la empresa concesionaria. La ciudad de Veracruz y los veracruzanos pagan una de las tarifas más altas por metro cúbico de agua “potable” a nivel nacional. La calidad del servicio y del agua es deplorable. 2.- Tomar una decisión sobre la concesión de los parquímetros, el contrato llega a su fin, y las quejas en contra de la empresa que impuso Julen Rementería y su Cabildo no cesan. 3.- Atender el gravísimo problema de corrupción al interior de Tránsito Municipal. La corporación opera con vicios arraigados y se ha convertido en una mafia institucionalizada. Finalmente, una duda legítima sobre esta nueva administración, será el papel e influencia que tendrá  Miguel Ángel Yunes Márquez en las decisiones de este gobierno municipal. La experiencia política y su exitosa gestión como diputado y dos veces alcalde de Boca del Río no pueden ser ignoradas, por lo que es válido preguntarse quién gobernará.