Aunque a nivel nacional el 2024 fue un año muy violento y hubo un alto número de homicidios, el estado de Veracruz cerró con 14 crímenes de odio, una cifra por abajo de la media nacional, de acuerdo a lo que señalan activistas de la comunidad LGBT.
Miguel Llinas, presidente de “Soy Humano”, afirmó que en el caso de la entidad veracruzana los focos rojos de ese tipo de ataques motivamos por las orientaciones sexuales de las personas, están en las regiones de Coatzacoalcos, Minatitlán, Xalapa, Poza Rica y Tuxpan.
"El común denominador es el odio; la saña, la alevosía, los agravantes y sobre todo que sea una persona abiertamente homosexual, transexual o lesbiana, es lo que nos da la pauta para saber que de primera mano tendríamos que sospechar que es un crimen de odio por la forma en la que son asesinados".
Sostuvo que lamentablemente de 10 casos solo se llega a resolver uno, lo que genera una elevada impunidad que también prevalece en la mayor parte de los asesinatos de ciudadanos de forma general, a lo que se le suma la revictimización por parte de las autoridades.
Indicó que sería positivo cambiar a la titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) porque "creo que estar tanto tiempo en un cargo envicia, obviamente hacen falto visiones nuevas y el llamado de que si va a seguir en el cargo tome en cuenta a la comunidad LGBT".
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Considera importante que se cree una fiscalía especializada para atender ese tipo de delitos o por lo menos un área específica para investigar agresiones contra grupos vulnerables.
Por otro lado ve como un "crimen de odio" el asesinato de Edhibaldo N, catedrático de la de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias de la Universidad Veracruzana (UV), quien fue hallado con signos de violencia en la colonia Las Quintas, de Córdoba.
