La leyenda del Día de San Bartolo, celebrado cada 24 de agosto, cuenta que en ese día el diablo anda suelto como venganza por una carrera que perdió con San Bartolomé, uno de los 12 apóstoles, quien era dueño del próspero Valle de Chicama, lo que despertó la envidia del diablo.
Y es que se dice que en dicha fecha el diablo retó a San Bartolomé a una carrera, apostando sus riquezas y el valle, pero San Bartolomé, con la ayuda de Dios, logró saltar un río y ganar, dejando al diablo ahogado. Desde entonces, se cree que el diablo sale cada 24 de agosto a causar problemas y desastres.
Por tal motivo, a lo largo del tiempo, los creyentes católicos recomiendan “no buscarle tres pies al gato” y evitar circular en carretera, manipular armas, sostener discusiones y peleas a golpes, meterse al agua, encender velas y fósforos, así cualquier actividad con riesgo.
El sacerdote José de Jesús Aguilar, subdirector de Radio y Televisión de la Arquidiócesis Primada de México, precisó en un video publicado en su canal de YouTube que se trata de “una superstición”, pues “esto es totalmente falso”.
“El demonio no está suelto únicamente ese día, sino que el demonio está suelto todos los días del año”, precisó.