La película el Joker 2, -estelarizada por Joaquín Phoenix-, a partir del personaje el Joker, -o el guasón-, protagonista antagónico de las historias de Batman, nos alerta sobre los riesgos de la justicia populista que seguramente veremos a partir de esta nueva reforma judicial, donde la elección de jueces, magistrados y ministros de la SCJN iniciará con una tómbola a realizarse hoy sábado 12 de octubre.
La historia de esta película se desarrolla a partir del juicio al que someten las autoridades a Arthur Fleck, -un comediante fracasado y con problemas psicológicos-, quien asume la identidad del personaje ficticio denominado el Joker.
Este sujeto será juzgado por los cinco asesinatos que se tienen documentados, mas uno que él mismo confiesa espontáneamente, y que es el de su propia madre.
Uno de los cinco crímenes fue perpetrado en contra del conductor del programa de TV que le estaba entrevistando en vivo, a la vista de millones de televidentes, lo cual generó alto impacto en la sociedad, pero lo convirtió en un influencer destacado.
La narración cinematográfica transcurre describiendo el contexto referente a la vida de este personaje en la cárcel, quien de ser considerado un tonto por los demás reclusos, -a partir de su influencia mediática-, se convierte en un líder de ellos.
El otro contexto fundamental de la película son las sesiones propias del juicio.
Es importante recordar que este personaje nacido de los comics norteamericanos y después presentado a través del cine de ficción como un antihéroe, -enemigo de Batman-, da un giro a partir de la primera película de esta saga cinematográfica que tiene como actor principal a Joaquín Phoenix y se convierte en una historia del mundo real.
El guion nos muestra a un personaje cotidiano, Arthur Fleck, quien sufre graves problemas psicológicos, -quizá esquizofrenia-, situación que se sale de control cuando el sector salud deja de darle los medicamentos por razones presupuestales.
Lo primero que salta a la vista de esta historia cinematográfica es el fenómeno psicosocial generado en la población a partir del carisma que este personaje proyecta públicamente, convirtiéndose en una víctima de la burocracia. Esto le transforma en un personaje famoso y admirado por un importante segmento de la población, que se identifica con él y le apoya.
Esta alegoría cinematográfica cobra gran actualidad, pues describe la psicología colectiva frente a la aplicación de la justicia, -convertida en un asunto público y sujeto a la intervención de grupos sociales con influencia mediática-, lo cual conlleva el riesgo de manipulación mediática por parte de grupos de poder involucrados en un juicio.
A su vez, la intromisión política en las decisiones jurídicas rompe con el principio de imparcialidad, que impide a los juzgadores profesionales proteger a la parte vulnerable de todo juicio o procedimiento judicial, para dar prioridad a los intereses de gente poderosa.
Aún recordamos las intromisiones del presidente López Obrador, quien desde las mañaneras juzgaba la actuación de los jueces y a veces les amenazaba con juicios políticos si sus
resoluciones no se ajustaban a su visión y criterio personal, -constituyendo ésto desde esa poderosa tribuna mañanera-, en una intromisión del Poder Ejecutivo en contra del Poder Judicial, que hasta esta fecha ha sido autónomo e independiente.
Este nuevo modelo de justicia que se inicia a partir de esta nueva reforma judicial populista, -estilo 4T-, marca el inicio de la frivolización de la impartición de justicia por una parte, -y por otra-, el sometimiento de los jueces a los intereses políticos del momento.
Esta película “El joker 2”, describe las presiones a las que estuvieron sometidos tanto el juez y los miembros del jurado ciudadano, frente a los intentos de este personaje, Arthur Fleck, de generar confusión mediática durante las sesiones del juicio, para obtener su libertad.
El intento de Fleck de frivolizar el juicio llegó al extremo de despedir a su abogada y solicitar al juez representarse a sí mismo, asumiendo el control de su defensa sin ser experto en derecho, confiado en su talento y dominio de la retórica, llegando a las sesiones vestido con el disfraz de “joker” y el rostro maquillado como el del personaje de los comics.
La película concluye en un veredicto condenatorio por parte del jurado y la fortaleza emocional de un juez que con mucho esfuerzo logró mantener el orden y la disciplina durante el proceso judicial.
Sin embargo, volviendo a los tiempos actuales, los riesgos para impartir justicia en casos de alto impacto mediático quedan reflejados en esta trama, cuando se muestran grandes grupos de simpatizantes manifestándose frente al edificio donde sesionaba el tribunal, así como el gran interés de la prensa por entrevistar a un reo tan carismático.
Seguramente seremos testigos de una nueva era, donde la justicia corre el riesgo de quedar en manos de gente no calificada para tan grande responsabilidad y motivada por el interés por convertirse en un protagonista político.
UN TIRO EN EL PIÉ
Un tiro en el pie se dieron los consejeros de la Judicatura Federal que apoyaron que se desecharan todas las impugnaciones y recursos jurídicos que emitieron los jueces para frenar la instrumentación de la reforma judicial.
¿Habrán estado conscientes de que con esa acción le dieron el tiro de gracia a los resabios de respeto que aún inspiraba el estado de derecho?
Sus detractores, -legisladores de la 4T-, en plan beligerante y soberbio ya habían declarado que no respetarían los recursos jurídicos que habían otorgado varios jueces, quedando por tanto en posición de “desacato” lo cual, en cualquier país del mundo, -incluso en Dinamarca-, hubiese tenido como consecuencia la destitución del funcionario en rebeldía jurídica. En contraste, a partir de ahora su rebeldía quedó legitimada por el Consejo de la Judicatura Federal.
Fue una falta de respeto no sólo para la persona de los jueces, -a quienes se les vulneró la autoridad que les confiere nuestra carta magna-, sino a la misma Constitución.
A partir de este hecho ningún funcionario de los poderes ejecutivo y legislativo respetará ningún recurso jurídico que provenga de juez o magistrado, simplemente llamará y negociará con el Consejo de la Judicatura Federal quien dará órdenes a su criterio para cambiar la resolución de un juez o magistrado. Todo el sistema judicial quedará de adorno, pues las resoluciones definitivas se negociarán en el CJF.
Estos consejeros con su voto traicionaron a la ley y a la Constitución y mostraron el camino a los funcionarios rebeldes, enseñándoles como violar la ley. Esto nunca había sucedido antes. Con un “dedazo” desactivaron el Estado de Derecho y nos regresaron a la “justicia tribal”. Debiesen ser juzgados por “desacato a la ley”, pues violaron muchas resoluciones judiciales sin dar ningún argumento en tiempo y forma. ¿Habrán estado presionados o amenazados?
Muy diferente hubiese sido dar curso a las impugnaciones que hoy se desecharon, y con otros instrumentos jurídicos defender el punto de vista de los legisladores de la 4T.
Qué desilusión que un jurista tan respetado como don Bernardo Bátiz, -inicialmente panista, después perredista y ahora morenista-, hubiera sido de los que con su voto jalaron el gatillo contra un indefenso “estado de derecho”.
En la democracia las resoluciones judiciales se acatan y no se pueden desechar; se confrontan con argumentos jurídicos. Con este fallo el CJF faltó el respeto a jueces y magistrados, pero también abrió la puerta para que cualquier funcionario público haga lo mismo.
Inaudito… del mismo Consejo de la Judicatura Federal salió la bala que mató al estado de derecho.
En tan sólo seis años de gobierno de la 4T se toleró que en muchos poblados se le faltase el respeto al Ejército, y los grupos delincuenciales ya no les rehúyen como sucedía anteriormente, sino que ahora los buscan y provocan impunemente… sin consecuencias. Tradicionalmente el Ejército ha sido una de las instituciones más queridas y respetadas por la sociedad mexicana por su institucionalidad y labor altruista frente a desastres naturales.
También estos últimos seis años se le perdió el respeto a la ley y al “estado de derecho”. ¿Qué sigue?
FUSIÓN DE CIVILIZACIONES
Hoy 12 de octubre se conmemora la llegada de Cristóbal Colón a nuestro continente, concretamente a la isla Guanahani, -en las Bahamas-, a la cual este explorador bautizó como San Salvador.
Colón nunca pisó el territorio continental de lo que hoy es América y por tanto, no llegó a nuestras tierras. Además, sus viajes fueron simplemente exploratorios. Por ello no se entiende la animadversión que contra él existe por parte de un sector de nuestras autoridades, que incluso desaparecieron la emblemática “Glorieta de Colón” ubicada en Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, así como la estatua de este visionario explorador que estaba en el centro de este emblemático lugar.
Grave epidemia es la politización de la historia, que hoy divide y confronta a la sociedad mexicana.
COMPARTE VIDA
La fundación Comparte Vida es una organización altruista, -sin ánimo de lucro-, que lleva 25 años ayudando a personas en posición vulnerable a luchar contra el cáncer. Una fundación dirigida por gente honorable.
Para allegarse fondos con el objetivo de continuar su labor humanitaria esta asociación organizó un concierto que darán el tenor Fernando de la Mora, así como Ely Guerra y Denise Gutiérrez, en la Sala Nezahualcóyotl, -de la UNAM-, el próximo siete de noviembre. Un gran evento musical cuyos ingresos serán dedicados a continuar dando servicio a la sociedad. Un gran espectáculo para financiar una noble causa humanitaria. www.fundacióncompartevida.org.mx