El tipo de trabajo y la naturaleza del mismo está cambiando rápidamente debido a la transformación digital y la automatización de muchas tareas. Esto está generando incertidumbre sobre el futuro del empleo y las habilidades que necesitarán los trabajadores para conservar la posición o escalar a una mejor. A finales del siglo pasado, la computación fue toda una revolución en el trabajo, a inicio de este siglo la novedad era el Internet, para el 2010 lo nuevo eran las redes sociales, hasta llegar a este momento en que tenemos una gran variedad de herramientas y opciones para desarrollar cualquier actividad profesional.
El Foro Económico Mundial acaba de publicar un extenso informe que analiza estas tendencias y ofrece recomendaciones para gobiernos, empresas y trabajadores.
Según el informe, para 2025 la mayoría de los empleadores planean expandir el uso de tecnologías digitales e incorporar automatización en sus procesos. Esto llevará a la creación de millones de nuevos roles, pero también provocará el desplazamiento de otros millones de puestos que no hayan logrado adaptarse a los cambios.
Las ocupaciones más afectadas serán las relacionadas con datos y AI, roles de economía verde, ingeniería y computación en la nube, así como puestos de cuidado de personas. En contraste, declinarán trabajos administrativos y manuales rutinarios.
Habilidades Técnicas Fundamentales
El rápido avance de la transformación digital está generando una demanda sin precedentes de trabajadores con sólidas habilidades técnicas, especialmente en áreas digitales y tecnológicas emergentes. Para permanecer empleables en el futuro cercano, los trabajadores necesitarán invertir de manera proactiva en desarrollar y actualizar continuamente un conjunto diversificado de conocimientos técnicos.
Sin duda, las habilidades más críticas que necesitarán dominar son las relacionadas con el análisis de big data y la inteligencia artificial. La adopción generalizada de estas tecnologías en todos los sectores económicos significa que los trabajadores requerirán al menos un nivel básico de competencia en minería y análisis de macrodatos, aprendizaje automático, deep learning y procesamiento de lenguaje natural.
Más allá de la IA, disciplinas como la ciencia de datos, la ingeniería de software, el desarrollo web y la computación en la nube también serán esenciales. Tener conocimientos sólidos en estadística, bases de datos, sistemas distribuidos y computación será un diferenciador importante en el mercado laboral.
Otras áreas técnicas que cobrarán relevancia incluyen la economía circular, debido al énfasis creciente en sostenibilidad; la transición energética y la ingeniería verde; la biomedicina, impulsada por los avances en tecnologías como la edición genética; la nanotecnología, con sus múltiples aplicaciones emergentes; la robótica avanzada y la automatización; así como diversos campos de vanguardia como la neurotecnología, la realidad aumentada, los vehículos autónomos y la computación cuántica.
El cambio más fuerte será que las habilidades puramente tecnológicas no serán suficientes. Conservaremos ventajas únicas en áreas como pensamiento crítico, creatividad, persuasión, negociación, atención al detalle, agilidad y colaboración.
Las profesiones del futuro requerirán una combinación de habilidades técnicas y humanas. Por ejemplo, los ingenieros necesitarán creatividad, los analistas de datos requerirán pensamiento crítico y los desarrolladores de software necesitarán desarrollar la colaboración.
La gran mayoría de los trabajadores del futuro necesitarán dominar un conjunto de habilidades técnicas para complementar sus competencias humanas únicas; la creatividad no será suficiente sin un respaldo tecnológico. Desarrollar al menos un conocimiento funcional en áreas como programación, análisis de datos, computación en la nube, ciencia de datos e inteligencia artificial serán esenciales.
Al mismo tiempo, tendrán que mantenerse al día con las tecnologías emergentes mediante capacitación y certificaciones constantes, ya que el panorama tecnológico evoluciona rápidamente. Las empresas también deberán apoyar estos esfuerzos de upskilling para contar con talento preparado para los trabajos del futuro.
Cómo Prepararse para el Futuro
Para los trabajadores, la clave será invertir desde ya en recapacitación y actualización constante de habilidades. Deberán identificar las áreas de conocimiento técnico que serán relevantes en sus sectores y desarrollar las aptitudes humanas que les permitirán complementar la IA.
Las empresas necesitarán reentrenar a su fuerza laboral, ofreciendo oportunidades de upskilling y reskilling. También deberán reimaginar procesos, tareas y roles para capitalizar las nuevas tecnologías y sacar el mayor provecho de las capacidades humanas.
Finalmente, los gobiernos deberán aumentar el acceso a educación de calidad en áreas STEM (science, technology, engineering, and mathematics), promover la adopción de tecnologías emergentes y colaborar con el sector privado para cerrar las brechas de habilidades. Deberán modernizar los sistemas educativos para enfocarse en desarrollar habilidades humanas únicas junto con alfabetización digital y técnica.
Según el Foro Económico Mundial, las 10 habilidades más valoradas por los empleadores en los siguientes años serán: