No hay pruebas suficientes de que el rancho Izaguirre fuera un crematorio clandestino, informó el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero.
A seis meses de primer cateo en el rancho de Teuchitlán, los servicios periciales de Jalisco no cuentan con los análisis físicos y químicos que en forma directa vinculen a diversas zanjas con la posibilidad de actividades crematorias, informó el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, en conferencia con medios de comunicación:
“Tampoco cuenta con los análisis físicos y químicos que en forma directa vinculen a diversas zanjas con la posibilidad de actividades crematorias, que deben haber estado sometidas y debieron haber estado sometidas, en su caso, a temperaturas entre 800 y 1200 grados, lo cual es necesariamente una muestra de pruebas que tienen que estar periciadas”.
Detalló que la Fiscalía de Jalisco no tiene un dictamen definitivo en el que se establezca con precisión la antigüedad y la identidad de los restos encontrados en el interior del rancho Izaguirre.
Y concluyó que la Fiscalía de Jalisco cometió diversas irregularidades y omisiones en las investigaciones del lugar.
doh
