Los incendios en la costa oeste de Estados Unidos siguen fuera de control mientras los equipos de rescate trabajan este martes a contrarreloj en medio de un clima favorable para atajar la extinción de las llamas.
El incendio Pickett, que afecta la región vinícola de Napa, ubicada en el norte de California, se ha contenido en un 17 % tras haber carbonizado 6.800 acres (2.700 hectáreas), según el último boletín del Departamento de Bomberos de California (Cal Fire, en inglés).
La preocupación de las autoridades se cierne sobre el humo visible sobre la zona a causa de que "grandes cantidades de combustible dentro del perímetro continúan ardiendo", indicó Cal Fire.
"Los bomberos continuarán las labores de contención y limpieza mientras trabajan en un terreno escarpado y accidentado", agregó la autoridad.
En cuanto al incendio Flat, en la vecina Oregón, ha logrado contenerse en un 7 % en las últimas 24 horas, mostrando signos favorables para su contención tras haber arrasado con 21.971 acres (8.500 hectáreas) desde su inicio el pasado jueves.
"Los bomberos continuaron avanzando a buen ritmo en la protección de las líneas cortafuegos. Los equipos de construcción extinguieron los puntos calientes y realizaron tareas de limpieza alrededor de las viviendas durante toda la noche", informó el Departamento de Bomberos estatal en un escrito.
Estos incendios vuelven a comprometer la costa oeste de EE.UU., ante el temor de que se repitan los devastadores fuegos que asolaron el condado de Los Ángeles a principios de este año.
La ola de incendios, que comenzó el pasado 7 de enero y tardó más de tres semanas en apagarse por completo, dejó al menos 31 muertos, 150.000 evacuados, más de 16.000 estructuras destruidas, y pasará a la historia de EE.UU. como uno de los desastres naturales más costosos.
Con información de EFE