El zodíaco tradicional que define los signos astrológicos lleva más de dos mil años desfasado respecto a las posiciones reales de las constelaciones, advierten astrónomos. La causa es un fenómeno astronómico conocido como precesión del eje terrestre, que ha desplazado lentamente la posición del Sol frente a las constelaciones a lo largo de los siglos.
Este desfase implica que millones de personas podrían no haber nacido bajo el signo que creen. Por ejemplo, alguien nacido a finales de agosto, identificado comúnmente como Virgo, habría nacido en realidad cuando el Sol estaba frente a la constelación de Leo.
¿Por qué ocurre esto?
La precesión es un movimiento oscilatorio del eje de rotación de la Tierra, similar al de un trompo, que completa un ciclo cada 26 mil años. Esta oscilación modifica gradualmente la perspectiva desde la Tierra del cielo estelar, lo que provoca que el punto del equinoccio de primavera —cuando comienza el año astrológico— ya no coincida con Aries, como ocurría hace dos milenios, sino con Piscis.
El fenómeno fue descubierto en el siglo II a.C. por el astrónomo griego Hiparco de Nicea, quien notó que las posiciones de las estrellas variaban con el tiempo. A pesar de ello, la astrología occidental moderna continúa utilizando el sistema zodiacal original.
El signo número 13: Ofiuco
Además del desfase temporal, los astrónomos recuerdan que el Sol no atraviesa solo 12 constelaciones al año, como sostiene la astrología tradicional, sino 13. La constelación número trece, Ofiuco, fue excluida por los babilonios para mantener la correspondencia con los 12 meses del año. Sin embargo, astronómicamente el Sol pasa más tiempo en Ofiuco que en constelaciones como Escorpio.
¿Qué dice la astrología?
Ante estas observaciones, astrólogos argumentan que el zodíaco tropical, el más utilizado en Occidente, no se basa en las constelaciones físicas, sino en las estaciones del año. Según esta visión, Aries comienza con el equinoccio de primavera, independientemente de la constelación que se observe en el cielo.
“No se trata del cielo real, sino de un sistema simbólico basado en los ciclos estacionales”, explican figuras del ámbito astrológico como Aliza Kelly y Chani Nicholas, quienes aseguran que los astrólogos conocen desde hace siglos la precesión de los equinoccios.
Astrología vs. astronomía
Mientras la astrología mantiene su popularidad como herramienta de orientación personal o entretenimiento, la comunidad científica insiste en que no se basa en observaciones actuales del cielo ni en principios verificables.
“El zodíaco astrológico no refleja las constelaciones reales”, señala el astrónomo James Kaler, profesor emérito de la Universidad de Illinois. “La astrología, como sistema, está desconectada de la realidad astronómica”.
En resumen, aunque tu signo zodiacal siga vigente en revistas y redes sociales, la ciencia astronómica indica que probablemente no corresponde a la constelación real bajo la cual naciste.
Fuente: DW