Las extorsiones continúan en Veracruz y en diversas modalidades; sin embargo, la telefónica sigue siendo una de las más recurrentes en donde los extorsionadores buscan obtener el dinero de sus víctimas.
En este caso, la víctima respondió una llamada de un teléfono con lada de Veracruz, en la que un sujeto le informó que una “falsa” amistad le quería hacer daño a la víctima y a su familia, por lo que contactó a unas personas para que privaran de su libertad a uno de ellos, por quien, aseguró, pagarían una buena cantidad de rescate.
Según el discurso del extorsionador, le dijo a la víctima que estaba afuera de su domicilio y le había dado seguimiento a su familia; sin embargo, se dieron cuenta de que son personas de trabajo y que no son gente adinerada.
Ante ello, el extorsionador le ofrece a la víctima revelarle quién sería la persona que finge su “amistad”, pero a cambio de una “ayuda económica”, de entre cinco a diez mil pesos.
El teléfono de origen de donde salió la llamada de extorsión es el: 2294340643, mismo que ya fue reportado ante las autoridades correspondientes.
A continuación el diálogo que sostuvo el extorsionador, a quien identificaremos con (E), con la víctima, identificada como (V):
E: Le comento a usted que esta persona le finge una amistad a usted y a su familia porque esa persona, señor, detrás de sus espaldas, fue capaz de contactarnos a nosotros vía telefónica, allá en el estado de Guerrero.
V: Ah, bien.
E: Esas personas, yo no sé si por algún tipo de envidia de rencor o coraje hacia usted hacia su familia, nos proporcionó y nos facilitó información suya y acerca de su familia, haciéndonos pensar y creer que ustedes cuentan con un negocio rentable.
V: Ah, bien.
E: Que tanto usted como su familia obtenían muy buenas ganancias de este negocio.
V: ¡Órale!
E: Y que si nosotros, señor, lo perjudicábamos a usted levantando a algún integrante de su familia, secuestrado, pues incluso ustedes podrían hacer un muy buen pago por la recuperación de este ser querido.
V: Ah, mire.
E: Mire, quiero que me entienda que para nosotros siendo nuestro trabajo, se nos encomienda y se nos dan indicaciones de trasladarnos por un familiar de usted. Estando aquí, en las afueras de su domicilio, nos dimos a la tarea de darle el seguimiento este día a su familia. Durante ese seguimiento nos pudimos dar cuenta que ustedes, pues simplemente son personas de trabajo, señor. Que en realidad ni usted ni su familia son gente adinerada, el cual se nos hace creer, ¿o me equivoco?.
V: Ajá, lo escucho.
E: Mire señor, nosotros lo buscamos, y lo buscamos con respeto porque antes que nada quiero que me entienda que no tenemos absolutamente nada ni en contra de usted ni de su familia. Me gustaría que me entendiera que yo no sé esta persona porque o cuál haya sido la intención de utilizarlo para lastimarlo. Yo creo que eso sí le corresponde y le tocaría venir a ver quién y por qué lo quiso lastimar de esta manera, ¿me entiende?. Nosotros lo único que le pediríamos es algo que está en sus manos, que es una ayuda, ¿Porque no nos ayuda usted con algo y viene a ver quién es esta persona que lo quiere perjudicar, señor?.
V: Ajá, lo escucho.
E: Entonces, ¿por qué no nos ayuda usted con algo?
V: Ajá. Platíqueme
E: Por eso, le estamos pidiendo su ayuda, ¿porque no nos ayuda con algo, señor?
V: Por eso, platícame cómo.
E: Lo único que le estamos pidiendo es algo que está en sus manos, que es una ayuda, ¿porque no nos ayuda con algo y viene a ver quién es esta persona que lo quiso perjudicar?.
V: Ajá. Dígame cómo.
E: Lo único que le pedimos es una ayuda económicamente, ¿Cuánto nos puede usted ayudar?.
V: Ah, ok. Es dinero.
El extorsionador le preguntó a la víctima con cuánto dinero contaba a la mano, pero al no obtener un monto como respuesta, y ante la respuesta de la víctima, quien refirió no contar con el dinero, el extorsionador sugirió un monto de cinco a diez mil pesos.