México fue ubicado en el primer lugar en el Índice Global de Crimen Organizado que advierte que el crimen opera como un sistema profundamente arraigado y con creciente infiltración en instituciones públicas del país.
El informe ubica a México con una calificación de 7.68 sobre 10, señalando que nuestro país destaca por mercados ilícitos como trata de personas, tráfico de migrantes, armas, drogas sintéticas, delitos ambientales y ciberdelitos con puntuaciones entre las más altas del mundo.
Refiere que la corrupción gubernamental es uno de los mayores facilitadores del crimen, con actores incrustados en el Estado evaluados con 8.50.
Afirma que la infiltración del crimen organizado se extiende desde municipios hasta niveles federales, y afecta elecciones, aduanas, fuerzas de seguridad y al sistema judicial.