Shoko Asahara, fundador de la secta Verdad Suprema y considerado el cerebro de los mortales ataques con gas sarín en el metro de Tokio en 1995, fue ejecutado en la horca junto a otros seis de los 13 miembros de la secta.
Según informa la cadena pública NHK, el hombre de 63 años, cuyo nombre real era Chizou Matsumoto, murió en la horca juntos a los otros seis que estaban condenados a la pena de muerte por un atentado que cobró la vida de 13 personas y dejó a decenas de personas en estado vegetativo.
Shoko Asahara, quien padecía una ceguera casi total desde que era niño, se encontraba detenido desde mayo de 1995, dos meses después del ataque del 20 de marzo en la red de metro de la capital de Japón.
En 2004 fue condenado a la pena capital por ese atentado y otros como el perpetrado también con gas sarín en 1994 en la ciudad de Matsumoto, en el que murieron ocho personas y 100 resultaron heridas.
Fuente:DW/Foto:Twitter/JAC
