La comparecencia del secretario de Finanzas y Planeación, Miguel Santiago Reyes Hernández, terminó en un fuerte encontronazo político luego de que el funcionario respondiera a la diputada panista Indira Rosales San Román que “no entiende” el funcionamiento del seguro para desastres naturales.
El comentario desató la molestia inmediata del diputado priista Héctor Yunes Landa, quien se levantó de su curul en dos ocasiones para enfrentar al secretario, mientras la presidenta de la Comisión de Hacienda y de la Mesa Directiva, Tanya Carola Viveros, le ordenaba volver a su asiento.
El conflicto estalló cuando el secretario afirmó que el seguro anterior para emergencias era inviable por su alto nivel de siniestralidad y, al explicarlo, lanzó la frase que detonó la discusión:
“Si estaban asegurados por 360 millones de pesos teníamos que pagar 320 millones de pesos para hacerlo válido. ¿En qué cabeza cabe? Si se tratara de la pérdida total de un automóvil para hablarlo en palabras sencillas y que la diputada lo entienda porque o no le explicaron o no lo entiende, yo creo que hay un problema de comprensión básica”.
La expresión provocó que Yunes Landa se incorporara y caminara hacia donde estaba el secretario. Después de la sesión, explicó que se levantó por dos motivos.
“Me acerqué a donde estaba el secretario de Finanzas, la primera fue porque el formato no permite más preguntas; le entregué las preguntas que no le pude hacer esperando una respuesta, con todo respeto y formalidad”.
Sin embargo, reconoció que la segunda ocasión fue directamente por la forma en que el funcionario se refirió a la diputada panista.
“Cuando le faltó al respeto a la diputada del PAN, le dijo que no entiende, que le pida a sus asesores que le expliquen, poco le faltó para decirle pendeja, yo le pedí respeto desde mi lugar, después esperé que la presidenta de la Comisión le llamara la atención y no lo hizo”.
El priista relató que esperó a que terminara la participación de una legisladora de Movimiento Ciudadano para solicitar el uso de la voz, pero reprochó que la presidenta no siguió el protocolo.