Comerciantes que se dedican a las vetimentas del niño Dios para la fiesta de la Candelaria, reportan bajas ventas de los artículos días antes de la fecha (2 de febrero).
Eduardo Gabriel Jiménez, quien comercializa sus productos a un costado de la Iglesia del Cristo del Buen Viaje en la zona centro de la ciudad de Veracruz, afirma que los eventos de norte han impactado los negocios del rubro.
"Ha estado tranquilo, nos ha afectado mucho el mal tiempo de aquí de Veracruz, el mal tiempo, por eso no hemos podido sacar a la venta los vestidos de niño Dios (...) La gente grande es la que compra los vestuarios", principalmente.
Hace más de 40 años su abuelo comenzó a vender artículos religiosos, continuó su mamá y desde hace 15 años él se sumergió en el comercio para seguir con la tradición familiar.
"Normalmente los vestuarios ya vienen con accesorios pero por si se nos llegan a acabar les metemos como por ejemplo la misericordia, sagrado corazón, pero son pocos, los vestimos de acuerdo al niño Dios".
Los precios dependen del tamaño y los detalles que busque el cliente; normalmente lo más solicitado son ropones, dejando a un lado los vestidos de santos.
Cabe destacar que unos días antes de la Candelaria, celebración que evoca la Presentación de Jesús en el Templo, la Purificación de la Virgen después del parto y la Virgen de la Candelaria, algunas personas están acudiendo a buscar la vestimenta para sus niños Dios.