Este 14 de enero cumplen tres años del sentido fallecimiento del padre Víctor Manuel Díaz Mendoza.
El padre Aurelio Mojica Limón, párroco de la catedral de Veracruz, señaló que sigue viva la labor que el padre Víctor llevó a cabo, y él sigue vivo en la mente de las personas que lo conocieron, pues mientras hay alguien que lo recuerde, la persona no ha muerto.
“Sigue viva su labor, sigue vivo en la mente, en el corazón de muchos que le conocimos y que creo que siempre estaba en él, esa disponibilidad para ayudar, para apoyar en algunas situaciones en las que se encontraban las personas y yo soy testigo de muchas de estas cosas que me tocaron vivir con él”.
Comentó que dentro de la diócesis se hacía cargo de varias actividades, además de la labor que llevaba a cabo en la catedral como la atención pastoral, así como el mantenimiento y la remodelación total del templo.
Resaltó la labor que llevó a cabo con el patronato Rescatemos catedral para la remodelación, misión que aún continúa con la gente de buena voluntad.
Mojica Limón recordó que el padre Víctor inició como Vicario en la Cosamaloapan, después estuvo en la parroquia del fraccionamiento Costa de Oro en Boca del Río, posteriormente llegó a la catedral de Veracruz, donde ejerció la mayor parte de su ministerio.
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