Luciana tiene ocho años de edad y está luchando por vencer al cáncer en el cerebro, sin embargo, pese a la urgencia del caso no ha recibido atención especializada en el Hospital Infantil de Veracruz, también conocido como Torre Pediátrica.
Tania Espinoza es su mamá y está desesperada porque la menor presenta vómitos que no cesan; la oncóloga le ha indicado que necesita ser revisada por un neurólogo, pero después de varios días no la han canalizado con uno.
Desde que Luciana fue diagnosticada e ingresada al centro hospitalario fue muy complicado el procedimiento, hubo una negativa de la administración por lo que la familia solicitó y obtuvo un amparo para que pudiera ser operada del cerebelo.
Ese recurso ya surtió efecto en el mes de abril, pero ahora en el seguimiento a la enfermedad de nuevo tiene que saltar obstáculos pues no hay un especialista en neurocirugía pediátrica que la pueda apoyar para que reciba radiación en la zona afectada.
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El pasado miércoles le dijeron que le harían una resonancia magnética, estudio que tampoco le han realizado por lo que tendrá que solicitar una respuesta por escrito para conocer qué es lo que está pasando.
"Ya ahorita es para que mi hija estuviera tomando tratamiento porque desde hace dos ciclos la mandaron a radiación, le metieron quimio y ahora no me hablaron, la ingresé pero aquí la situación es que no hay médico neurólogo pediatra".
Ante las inconsistencias, de última hora le notificaron que a la paciente ya no la tratará un pediatra sino un neurólogo general; "¿O sea cómo van a traer a un neurólogo general a una Torre Pediátrica? ¿De qué se trata? ¿No hay especialistas?".
Señaló que con la nueva administración han habido varias inconsistencias e irregularidades que solo están poniendo en riesgo la vida de su hija y de otros pequeños enfermos.
