Ganaderos de Huimanguillo, Tabasco, alertaron de que casi dos mil cabezas de ganado fueron sepultadas, esto, debido a una muerte masiva de reses.
El ganadero de dicho municipio, Felipe Valencia, afirmó que tanto él como su familia lo han perdido todo debido a esta situación.
"Estamos viendo un desastre que jamás en mi vida me lo hubiera imaginado, a partir del día viernes de la semana pasada inició para mí un calvario, todavía hay unas muriendo, pero ya todo se acabó, de los 600 animales, cuando mucho quedan 25-30", lamentó.
De igual forma, expresó que andan enterrando a las cabezas de ganado para evitar una mayor contaminación de la que ya se tiene.
"Las estamos enterrando para evitar contaminar más, ya por lo del medio ambiente o es alguna otra bacteria que no nos vaya afectar, le vamos a echar cal y las vamos a enterrar", sentenció.
Fuente: El Universal / Foto: Ilustrativa de Pexels /