Este domingo, el morenista Eduardo Ramírez Aguilar rindió protesta como gobernador de Chiapas, prometiendo que la paz volverá a la entidad que se ha visto afectada por hechos de violencia.
Desde el Centro de Convenciones Polyforum, a las afueras de Tuxtla Gutiérrez, Ramírez Aguilar insistió que entre sus metas está el mejorar las condiciones de una entidad que en los últimos años ha estado envuelta en hechos graves de violencia en varias regiones, sobre todo en Los Altos y los límites de la entidad con Guatemala.
“En la Selva, en el norte, en la fronteriza, en la Fraylesca, en la Costa, en el Soconusco, en Los Altos, en los tuxtepeques, en el Centro, la paz va a volver a reinar en nuestros caminos, va a volver a regresar a los caminos de Chiapas", aseguró el morenista.
Ramírez Aguilar dijo que cuenta “con la claridad y experiencia, y también con la valentía de asumir esta responsabilidad. Asumiremos como propios los ejes que ha convocado la Presidenta, como estoy siempre muy atento en el tema de seguridad: primeramente, atender las causas, inteligencia e investigación, cooperación, y cero impunidad al delito".
El nuevo mandatario chiapaneco, advirtió a Oscar Alberto Aparicio Avendaño, titular de la nueva Secretaría de Seguridad del Pueblo, y a Jorge Luis Llaven Abarca, Fiscal estatal, que están a prueba.
"Pedirles a ambos, a ustedes dos, es importante señalarle al pueblo de Chiapas que mi Gabinete en Seguridad están a prueba, si no hay resultados (seña de se van)", apuntó.
Y agregó: "Pedirles que todo donde exista el delito de extorsión, derecho de piso, asalto a carreteras y demás delitos que lastiman al pueblo vamos con todo, todos los delitos del fuero común, vamos con todo, con valor, aquí no hay derecho al miedo, la ley se va a aplicar".
Fuente: Reforma / Foto: Facebook / JAC
