El pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general, con 353 votos a favor y 123 en contra, la reforma constitucional para dar prioridad al Estado mexicano en la generación de energía eléctrica y convertir en empresas públicas a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
Morena y partidos aliados buscan que CFE y Pemex se conviertan de nuevo en empresas públicas del Estado, tal como eran consideradas antes de 2013, año en el que el Congreso avaló otra reforma energética que las convirtió en empresas “productivas”.
La secretaria de Energía, Luz Elena González, detalló que al convertirse en empresas productivas, Pemex y CFE actuaron con un esquema de rentabilidad y con reglas de mercado. Al devolverles el carácter de empresas públicas, Morena busca que actúen bajo una lógica de bienestar social para proveer servicios a mejores precios a todas las comunidades del país.
Para convertir a Pemex y a CFE en empresas públicas, los diputados reformaron los artículos 25, 17 y 28 de la Constitución Política.
Esta reforma desató una discusión entre Morena y legisladores de oposición. Los de la mayoría oficialista defendieron que la reforma servirá para garantizare el suministro de electricidad a bajo costo hasta en las comunidades más pobres y alejadas del país.
Mientras que los diputados del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano alegaron que el Estado mexicano no cuenta con la capacidad de hacer realidad todo esto y requieren de la iniciativa privada.
Cabe destacar que la reforma constitucional avalada en lo general por la Cámara de Diputados es una nueva edición de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que Morena avaló en 2021, pero que fue invalidada por la Suprema Corte debido a que contradecía lo establecido por la Constitución.
Los legisladores continúan en la discusión de las reservas presentadas por los partidos.
Fuente: Animal Político / Foto: Archivo / JAC