En el balcón principal de Palacio Nacional, la noche del 15 de septiembre el presidente Andrés Manuel López Obrador dio su último Grito de Independencia con un llamado a su movimiento político: “¡Viva la Cuarta Transformación!”.
“¡Viva la fraternidad universal!”, “¡Vivan los trabajadores mexicanos que son de los mejores del mundo!”, “¡Viva la grandeza de México!”, “¡Vivan todas y todos los mexicanos!” y “¡Viva la Cuarta Transformación!”, fueron algunas de las arengas que lanzó.
¿Cuál es el verdadero Grito de Independencia?
Hiram Becerra, investigador y promotor cívico, afirma que el Grito de Independencia es para conmemorar la proclamación que hizo hace 214 años el cura Miguel Hidalgo y Costilla en la población de Dolores, ubicada en la intendencia de Guanajuato, hoy Dolores Hidalgo, Gto.
La primera celebración de la que se tienen registros data del 16 de septiembre de 1812 cuando Ignacio López Rayón hace en Huichapan, Hidalgo, en donde ordenó una descarga de artillería, hizo sonar las campanas y leyó una proclama escrita por Andrés Quintana Roo.
Fue José María Morelos y Pavón quien en los Sentimientos de la Nación propone solemnizar el 16 de septiembre de todos los años como el día del aniversario en que se levantó "la voz de la Independencia y nuestra santa libertad comenzó pues en esos días se abrieron los labios de la Nación para declarar sus derechos".
En 1863 se cambió la celebración al 4 de octubre porque hubo una epidemia de cólera. La única ocasión en la que no hubo Grito fue el fatídico 1847 cuando las tropas norteamericanas habían invadido la Ciudad de México y la bandera de Estados Unidos ondeaba la noche del 15 de septiembre de ese año en Palacio Nacional.
Quien realizó por primera vez la celebración del Grito de Independencia en Dolores Hidalgo fue Maximiliano de Habsburgo siendo emperador de México, desde el balcón de la que fue casa de Miguel Hidalgo.
Para 1910 el general Porfirio Díaz la ceremonia era totalmente diferente: a las 11:00 de la noche repicaban las campanas de la Catedral Metropolitana, después había un silencio y porteriormente los vivas: "¡Viva la libertad!, ¡Vida la Independencia!, ¡Vivan los héroes de la Patria!, ¡Viva la República!, ¡Viva el pueblo mexicano!.
Es decir, la tradición de mencionar a cada uno de los héroes o lo tres "vivas" con Porfirio Díaz no se da; tampoco tocó la campana. Al día siguiente lo hizo.
Seis años después (1916) Venustiano Carranza no pudo dar el Grito porque le dio un fuerte resfriado.
Ya con los gobiernos revolucionarios se empieza a dar el Grito en donde se mencionan a los principales héores como Miguel Hidalgo; Morelos; Allende y la corregidora Josefa Ortiz de Domínguez.
Uno de los datos curiosos es que en 1950 Miguel Alemán no pudo tocar la campana porque el badajo se soltó y no sonó.
Vale la pena resaltar que legalmente no hay un protocolo de la ceremonia del Grito de Independencia, quien tendría que manejar escrupulosamente cómo se debe de manejar sería la Ley sobre el Escudo, el Himno y la Bandera.
"Todos los presidentes le han dado su toque muy especial, repito, no está formalmente establecido cómo debería de ser pero sí debe de llevar por lo regular: ¡Viva la Independencia!, ¡Vivan los héroes que nos dieron patria!, ¡Viva Hidalgo, Allende, Morelos, la Corregidora!, ¡Viva la unidad nacional!, ¡Viva México!, ¡Viva México!, ¡Viva México!".
¿Al no haber un protocolo establecido en la Ley el presidente en turno puede lanzar cualquier arenga?
"Puede lanzar cualquier arenga, pero lo que se ha procurado es que sí se grite o sí se mencione a los héroes de Independencia y las tres veces de ¡Viva México!, pero puede quitar o poner".
¿Se ha mezclado en alguna ocasión cuestiones políticas, algún movimiento o partido?
"No, no se ha hecho o no se hacía porque se supone que es un momento máximo de unidad nacional en el cual el Presidente de la República como jefe del Estado mexicano tiene que ser factor de unidad nacional en esa noche que es la máxima de representación de los mexicanos".
