Obispos de México anuncian jornada de oración por Venezuela; piden resolver diferencias por vía pacífica

Imagen Obispos de México anuncian jornada de oración por Venezuela; piden resolver diferencias por vía pacífica

En medio de la crisis en Venezuela por los resultados de las elecciones del pasado domingo, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó su solidaridad con el pueblo venezolano en estos “momentos de gran trascendencia para su nación”.

Por ello, anunciaron una jornada de oración para este domingo 4 de agosto, por lo que exhortaron a los fieles mexicanos a sumarse a esta iniciativa.

Asimismo, piden a los actores de la sociedad venezolana a buscar caminos de diálogo y encuentro, y que las diferencias o controversias se resuelvan por vías pacíficas e institucionales.

A continuación el comunicado:

La Conferencia del Episcopado Mexicano, en comunión con nuestros hermanos venezolanos, expresa su solidaridad fraterna con el pueblo de Venezuela en estos momentos de gran trascendencia para su nación.

Nos unimos espiritualmente a la jornada de oración convocada para el domingo 04 de agosto por el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), la Conferencia Episcopal Venezolana y la Conferencia Episcopal de Colombia.

Invitamos a todos los fieles mexicanos a sumarse a esta iniciativa, recordando las palabras del Papa Francisco: «La oración nos ayuda a amar a los demás, a pesar de sus errores y sus pecados».

Reafirmamos la importancia de la democracia como expresión de la participación de los ciudadanos en la construcción del bien común. Como nos enseña la Doctrina Social de la Iglesia, «una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho y sobre la base de una recta concepción de la persona humana» (Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 406).

Hacemos un llamado a todos los actores de la sociedad venezolana a buscar caminos de diálogo y encuentro. Como nos recuerda el Papa Francisco en Fratelli Tutti, «El auténtico diálogo social supone la capacidad de respetar el punto de vista del otro» (FT, 203).

Exhortamos a que cualquier diferencia o controversia se resuelva por vías pacíficas e institucionales, respetando siempre la dignidad de cada persona y buscando el bien común de toda nación.

Nos unimos a las palabras de nuestros hermanos obispos venezolanos: «¡Es Cristo mismo quien sostiene nuestro país! Que el desaliento y la desesperanza no encuentren lugar en la vida del cristiano». Esta afirmación nos recuerda que nuestra fe debe ser una fuente de esperanza y transformación social.

 

Fuente: CEM / Foto: EFE / JAC

Editor: Redacción xeu
da clic