La prueba PISA es la única fuente para conocer los conocimientos de los jóvenes mexicanos en matemáticas, ciencias y comprensión lectora, por lo que sería "pésimo" prescindir de esta evaluación, mencionó Fernanda Domínguez, coordinadora de sociedad incluyente de IMCO.
En entrevista para XEU Noticias, explicó que esto pondría en riesgo la educación, ya que no se tendría un punto de partida para implementar nuevas políticas públicas en materia de educación.
"Es una decisión con un poco de narrativa, al final la SEP con Marx Arriaga se han peleado con las evaluaciones porque dicen que no ayudan a conocer los aprendizajes y esto es lo más lejano de la realidad, las pruebas estandarizadas si son sistematizadas y estandarizadas y bueno desde que se pelean con estas pruebas, implementan las pruebas diagnosticas y de principio no son obligatorias", señaló.
"Realmente ellos consideran que estas pruebas son la nueva manera de evaluar los aprendizajes con el objetivo de darle a los docentes el saber cómo están los jóvenes, pero para diseñar políticas públicas para eso se necesitan pruebas estandarizadas", indicó.
