Un niño de cinco años murió después de que un dentista le extirpara dos de sus dientes de leche bajo anestesia general.
Se sabe que el pasado 17 de diciembre, Marianna Vakhniak y su esposo Viktor Pashnyk llevaron a su hijo de cinco años a la clínica dental Ori-Dent para que le sacaran dos de sus dientes de leche.
Según información compartida por el padre del menor, Veles, como se llamaba el niño, estaba nervioso, por lo que el cirujano se ofreció a anestesiarlo durante la operación.
Poco después de que comenzara el procedimiento, la madre escuchó gritos y observó horrorizada cómo los trabajadores médicos se apresuraban a la habitación donde se encontraba su hijo.
Después de 20 minutos, dos equipos de servicios de emergencia habían llegado a la clínica y llevaron a Veles al hospital local, San Nicolás. Vakhniak compartió que le dijeron que el corazón del niño se había detenido después de que lo pusieran bajo anestesia general.
Los médicos habían logrado reanimarlo, pero para cuando fue transferido a una unidad de cuidados intensivos, a Veles le diagnosticaron muerte cerebral.
"Todavía no está claro para nosotros qué se le hizo en el quirófano a un niño sano, por lo que ahora estaba en coma sin posibilidad de vida", dijo su padre en diciembre cuando el menor quedó en coma.
Veles fue puesto en soporte vital y murió el pasado 13 de enero.
Las autoridades han iniciado una investigación a los trabajadores del consultorio dental para saber si fueron responsables de la muerte del niño, informó la Oficina del Fiscal General.
Fuente: Milenio /