La modalidad 40 es una continuación voluntaria en el régimen obligatorio es una manera de seguir sumando semanas, cotizando salario, cuando la persona ya no tiene una relación laboral y está cerca de la jubilación, que es útil para aumentar la pensión, señaló el contador Óscar Castellanos.
Dijo que aplica solo cuando la persona ya no tiene un trabajo, esa modalidad es atractiva para ciertas personas con solvencia para poder poder seguir pagando por su cuenta en el IMSS y dependiendo de ello puede ser el monto de su pensión.
Aplica para personas que no tienen trabajo y por ello pueden aplicar para la modalidad 40, es decir que celebran un convenio con el IMSS para que por su cuenta vayan pagando, estableciendo el salario o base de pago, que incluso puede ser superior a lo que ganaba normalmente en su empleo.
Señaló que la modalidad 40 no aplica para todos, algunos que tienen un buen salario no la necesitan porque de por sí tendrán una buena pensión.
Para ingresar a la modalidad 40, necesita que su baja en su último trabajo no tenga más de 5 años y que antes de la fecha de su baja haya cotizado al menos un año. Cuando las personas tienen uno, dos y hasta 5 años de no trabajar, pueden ingresar a esa modalidad y pagar en retroactivo al IMSS, más la actualización y los recargos, es una cantidad importante.
Incluso, hay instituciones que financian esos pagos, pero hay que evaluar si conviene o no porque eso implica un pago adicional.
En el IMSS pueden orientar a las personas sobre qué tienen que hacer y qué opción les conviene, cada persona es diferente, precisó.
El contacto del contador Óscar Castellanos es para cualquier orientación es el 2299 29 04 16.