El Centro de Rehabilitación Infantil de Veracruz, A.C. (Criver), ofrece aproximadamente 10 mil atenciones al mes, entre consultas y terapias a niños y adolescentes discapacitados o con alguna condición de vida diferente.
Amelita Acosta de Cházaro, presidenta del voluntariado del organismo, afirmó que las rehabilitaciones son a menores que residen en 100 municipios de la región y de otros estados vecinos como Oaxaca.
"Después de la pandemia fue muy difícil empezar, pero empezamos con más fuerzas; tenemos todo el equipo renovado y necesitamos algo por hacer (...) Todo lo estamos tratando de hacer de los mejor" posible.
Indicó que aunque existen muchas necesidades, sería importante contar con medicamentos para niños con epilepsia, menores con autismo, entre otras enfermedades y trastornos.
"Nosotros tratamos de comprar muchísimo material pero todo es insuficiente porque cada vez entran más y entras más, entran cinco o seis niños nuevos diarios".
Ante la gran demanda que existe de los servicios y el crecimiento en el número de pacientes, lamentablemente han tenido que espaciar las consultas, es decir, que pasa más tiempo entre una y otra atención que les dan.
"Hay muchos niños con parálisis cerebral, es un gran reto y a nosotros nos toca la parte humana y el trabajo porque nosotros damos la cara y trabajamos con el corazón por esos niños y los queremos mucho".
