El histórico Baluarte de Santiago es uno de los 9 que formaban parte de la muralla de piedra múcara que protegió Veracruz de los ataques de los piratas.
El edificio permanece hasta nuestros días y se ubica en Rayón esquina 16 de Septiembre, en el centro de Veracruz y se salvó de ser derribado porque era el fuerte donde se almacenaba la pólvora, reveló el arquitecto Francisco Muñoz.
“Hablar un tanto del valor del Baluarte de Santiago es hablar de un complejo defensivo muy amplio que tuvo Veracruz, fue lo primero que se hizo en 1634, el Baluarte de Santiago y el de la concepción, que eran los baluartes que estaban en la costa de la ciudad; custodiaban la aduana y el puerto y en una segunda etapa se construye la muralla que da hacia tierra”.
“El baluarte de Santiago fue un almacén de pólvora y fue el motivo por el cual se salvó realmente, con respecto a los demás baluartes”, detalló Francisco Muñoz,
El especialista describió el perímetro de lo que fue la antigua muralla: “Veracruz fue una ciudad amurallada con 9 baluartes: el Baluarte de Santiago, el de San José, el de Santa Bárbara, que ahora es el edificio de correos, después continúa la punta de diamante que era una puerta y luego Santa Gertrudis que prácticamente está en Esteban Morales y luego el de San Javier y continúa el baluarte de San Mateo, que actualmente ocupa el parque Escuela Clavijero y continúa el de San Mateo y San Juan”.
Aunado a la muralla, estuvo la construcción de la fortaleza de San Juan de Ulúa, que fue planeada por los españoles al mando de Hernán Cortés para defender a la ciudad de los piratas.
“Un fuerte de apoyo que es Ulúa, durante todo el siglo 16 fue un muro de argollas, pero después de la llegada de Francis Drake, dos años después en 1683 ataca el pirata Laurent de Graff y tres años después empieza la construcción de esta fortaleza que hizo Jaime Frank y después se desarrolla todo este proceso muy complejo de baluartes y baterías”.
Un documento que está en el Servicio Histórico de la defensa en el Castillo de Vincennes en Francia, muestra el perímetro de la muralla.
“Son vestigios de esta Gran Muralla y de este gran aporte de defensa que tuvo Veracruz en la cuando fue nueva Veracruz y que de alguna manera nos proporciona una identidad muy importante con las ciudades del Caribe
Fue en 1880 cuando se empezó a planificar el derribe de la muralla para la expansión de la ciudad y sólo quedó el Baluarte de Santiago.
“En 1885 Pearson pone la primera piedra del desarrollo del puerto, pero era importante desarrollar en ese momento la expansión de la ciudad y por ese motivo se destruyeron los baluartes y la verdad los baluartes eran muy pequeños, creo que ni siquiera la cuarta parte del Baluarte de Santiago, pero las murallas también eran pequeñas y angostas y tampoco eran tan altas, de 2.50 hasta 4 metros; en este momento de desarrollar el puerto de Veracruz con una expansión de desarrollo modernizante va a hacer que la ciudad crezca de 66 manzanas al proyecto que en 1907 se ve contemplado para el período porfiriano que es con 420 manzanas, un desarrollo descomunal impresionante del cual, la muralla, además era un signo de la historia castrense, de opresión que tuvo el virreinato en Veracruz, así que de alguna manera el pensar de los veracruzanos y de las autoridades para la preservación del patrimonio edificado estaba más allá de la conservación, sino más bien, obviamente desecharse de esta idea de opresión”.
Francisco Muñoz, quien hizo el proyecto para la restauración del Baluarte de Santiago, recalca que en el edificio hay vestigios del almacén de pólvora: “Realmente, tuvimos oportunidad de hacer el proyecto y el levantamiento para el INAH, fue un trabajo muy bello porque se hizo a través de láser y se encontraron obviamente vestigios del sistema de funcionamiento de las chimeneas que ventilaban y que permitían tener toda la ductería de ventilación que debería de tener el almacén de pólvora para mantenerse seco, entonces por mucho tiempo duró como almacén de pólvora, todo el siglo 19 y actualmente pues pertenece a está asignado al Ayuntamiento y dejó de ser el museo de las Joyas del Pescador y seguramente van a montar una museografía, espero que sea con el tema defensivo”.
El gobierno federal lo entregó al INAH para su conservación, pero el entorno, el parque y el área verde está asignado al ayuntamiento, es por eso que le da el mantenimiento Ayuntamiento de Veracruz.
“Es un edificio muy bello que ya está restaurado y ojalá que el INAH, pueda permitir el acceso, está muy a la mano en el centro y que sea un icono más para visitar en todo el itinerario cultural que tiene que ofrecer Veracruz”, dijo Francisco Muñoz.
Así como San Juan de Ulúa, el Baluarte de Santiago es testigo mudo de la historia que guarda Veracruz, por ello la importancia de que esté abierto al público.
Cabe señalar que desde el 2017 el Baluarte de Santiago fue cerrado por restauración y aunque la obra concluyó, el recinto permanece cerrado al turismo.