Tras privar de la libertad a Rosa Isela Castro Velázquez, el pasado 30 de noviembre en la prolongación Las Bajadas del municipio de Veracruz, Verónica “N”, apoyada por un sujeto conocido como Gonzalo “N”, habrían atado a una silla a la víctima, amordazado y amarrado de sus extremidades para extraerle con una navaja de su vientre a su bebé.
De acuerdo a como habría sido encontrado el cadáver de la víctima, a Rosa Isela le habrían colocado una bolsa de plástico en la cabeza para que dejara de respirar, y una vez logrado su macabro cometido, y habrían arrojado su cuerpo junto a un río en el municipio de Medellín. Posteriormente, los detectives ubicarían a los presuntos responsables este sábado, asegurándoles a la recién nacida.
Rosa Isela Castro Velázquez tenía ocho meses de embarazo y fue contactada bajo engaños a través de Facebook por su presunta asesina quien enfrentaba una serie de discusiones con su actual pareja identificado como Gerardo “N”, por no poderle dar un hijo, por lo que presuntamente planeó privar de la libertad a la víctima y matarla para robar a su hijo, apoyada por Gonzalo “N”, a quien sólo le había pagado por ello presuntamente mil pesos.
El asesinato de Rosa Isela consterna a los mexicanos quienes exigen justicia.
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