El Departamento de Comercio de los Estados Unidos, anunció que a partir del 14 de julio se le impondrán aranceles del 20.91 por ciento a la mayoría de los tomates mexicanos.
En respuesta, la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que esta decisión nunca le fue notificada al gobierno de México.
"No se notificó al gobierno mexicano, ni a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, ni a través de la Secretaría de Economía, ni a través de la Secretaría de Agricultura".
Agregó que esta decisión, únicamente se notificó a abogados de los productores de jitomate en Estados Unidos.
Además, insistió que la decisión de los aranceles a los tomates, se tenía que haber notificado al gobierno federal.