Desde Chiapas, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que el ejercicio del poder sin la participación del pueblo “ya se fue al carajo”, y sostuvo que al cierre de su gobierno “ahora sí hay una auténtica democracia: el que manda en México es el pueblo”.
López Obrador dijo, junto a Claudia Sheinbaum, que está orgulloso de haber encabezado un movimiento de transformación en el que participaron millones de mexicanos, pero reiteró que en poco más de dos semanas será un vecino más de Palenque, porque debe retirarse y “dar un frenazo” a su vida pública, pues no puede exigirle más a su corazón luego del infarto que sufrió.
En una ceremonia celebrada en la estación Palenque del Tren Maya, donde conmemoró los 200 años de la incorporación de Chiapas a la federación mexicana, López Obrador dijo:
“El motor está bien, pero la carrocería ya no anda bien. Cierro el ciclo. Sobre todo tengo un problema de una enfermedad cardiaca porque me dio un infarto y ya no puedo forzar más mi pobre corazón”.
“Ya me voy a retirar y voy a venir a vivir aquí a Palenque. Quiero que hagamos un acuerdo, un compromiso, nada de que oye Andrés Manuel es que quiero hablar contigo, traigo aquí este asunto. Yo ya no voy a poder ocuparme y además, primo hermano, si te abro la puerta a ti, se la voy a tener que abrir a millones de mexicanos. Ya terminé mi ciclo”, agregó el mandatario mexicano.
El mandatario fue recibido en Palenque por miles de personas con el lema “Bienvenido a casa, presidente”.
También destacó que tras su retiro, la continuidad del movimiento la encabezará su sucesora.
“Vamos a seguir, y digo seguir porque yo voy a estar ahí trabajando en mi investigación, pero la transformación va a continuar con una gran dirigente, Claudia Sheinbaum Pardo”, dijo.
Fuente: La Jornada / JAC
