La ciudad de Nueva York despertó este domingo teñida de blanco tras la llegada de la primera nevada de la temporada, que se ha dejado notar también en Boston y Filadelfia.
La nieve comenzó a caer a última hora del sábado y continuó el domingo por la mañana llegando a acumularse hasta 2,6 pulgadas (casi 7 centímetros) en algunos puntos de la ciudad.
La Gran Manzana amaneció bajo un manto blanco uniforme pero no muy compacto, aunque en algunos puntos de las afueras y en Nueva Jersey se han registrado nevadas mayores.
En esas zonas se espera que acumulen hasta seis pulgadas de nieve (más de quince centímetros).
El Servicio Meteorológico Nacional informó que la tormenta invernal terminará este domingo por la tarde, aunque las temperaturas seguirán siendo bajas. No se espera una nevada demasiado importante en términos de cantidad de nieve.
El Departamento de Sanidad de la ciudad de Nueva York lleva desde el viernes esparciendo salmuera en las carreteras y las autoridades ya trabajan para asegurar una correcta circulación en la ciudad. EFE