La Guardia Costera de la provincia suroriental china de Fujian informó este miércoles de la realización hoy de "patrullas rutinarias de aplicación de la ley" en aguas cercanas a las islas Kinmen, un archipiélago bajo control taiwanés y ubicado frente a las costas de China.
El portavoz de la institución Zhu Anqing aseveró además que guardacostas chinos "han organizado una flota de buques desde este mes para reforzar continuamente las patrullas en las aguas cercanas a Kinmen y llevar a cabo acciones especiales de seguridad pública durante la moratoria de pesca de verano".
Estas acciones, declaró Zhu, "fortalecen el control de las aguas pertinentes, protegen los derechos e intereses legítimos de los pescadores chinos, incluidos los de Taiwán, y la seguridad de sus vidas y bienes, y garantizan la navegación y el orden operativo normales", según un comunicado publicado en la página web de la Guardia Costera de China.
En un comunicado aparte, la Administración de la Guardia Costera (CGA) de Taiwán manifestó este miércoles que este tipo de maniobras no son "patrullas legales", sino que se trata de un "hostigamiento sistemático" que "afecta negativamente el ambiente entre ambos lados del Estrecho y pone en riesgo la paz y estabilidad regionales".
La autoridad marítima detectó a las 08:50 horas (00:50 GMT) de hoy a cuatro buques de la Guardia Costera china en "aguas restringidas" de las islas Kinmen, una zona que abandonaron en torno a las 11:03 (03:03 GMT) tras ser apercibidos por los guardacostas taiwaneses.
Asimismo, la CGA detectó este martes la "incursión sorpresa" de otros cuatro barcos de la Guardia Costera china cerca del archipiélago, después de que las embarcaciones apagaran sus sistemas de identificación automática (AIS).
Los guardacostas taiwaneses desplegaron cuatro patrulleros para "bloquear el avance" de los barcos chinos y, mediante transmisiones de radio en mandarín e inglés, exigirles que "cambiaran de rumbo y abandonaran la zona", algo que consiguieron a las dos horas, señaló la CGA en otro comunicado.
La tensión en torno a las Kinmen se recrudeció a partir del 14 de febrero del año pasado: ese día, una pequeña embarcación china -que no tenía certificado, nombre ni número de registro en puerto- irrumpió en aguas de este archipiélago y dos de sus cuatro tripulantes fallecieron tras una persecución de la Guardia Costera de Taiwán.
En respuesta, China anunció "patrullas" en la zona para "proteger las vidas y las propiedades de los pescadores", acusando a las autoridades taiwanesas de tratar a esos marineros chinos de forma "brusca y peligrosa", aunque Taipéi insistió en todo momento en que sus guardacostas procedieron "de acuerdo a la ley".
En los últimos meses, la Guardia Costera de Taiwán ha denunciado el "acoso sistemático" de los buques de la Guardia Costera china en los alrededores de las Kinmen, a los que acusa de realizar un promedio de cuatro incursiones mensuales.
Fuente: EFE