Cuando el presidente de Colombia, Gustavo Petro, rechazó los aviones militares que transportaban deportados, enfureciendo al presidente Dolad Trump, que impuso 25% de aranceles por ello, fue el expresidente Álvaro Uribe Vélez quien resolvió la crisis diplomática con los Estados Unidos, destaca el New York Times.
En publicación señala que fue la nueva Canciller Laura Sarabia fue quien llamó a Uribe para pedirle ayuda.
Informa que Uribe intervino rápidamente, “trabajando con contactos en Washington para ayudar a desactivar una crisis que amenazaba con devastar la economía de Colombia y trastornar las relaciones en la región”.
Y destaca que Luis Gilberto Murillo, ministro saliente de Relaciones Exteriores de Colombia, también participó estrechamente en las negociaciones con el gobierno estadounidense, citando que en una entrevista reveló que Petro tenía dos razones para bloquear los vuelos estadounidenses como era el trato digno a los colombianos y el uso de aviones militares.
doh