Los mediadores de las conversaciones para un alto el fuego en Gaza dijeron el viernes que las conversaciones de dos días concluyeron y que pretenden volver a reunirse en El Cairo la próxima semana para sellar un acuerdo para detener los combates.
En un comunicado emitido el viernes, Estados Unidos, Egipto y Qatar dijeron que las conversaciones fueron constructivas y se llevaron a cabo en una atmósfera positiva. Presentaron a ambas partes una propuesta y esperan seguir trabajando en los detalles de la implementación en los próximos días.
La nueva ronda de conversaciones comenzó el jueves y tenía como objetivo detener la guerra de 10 meses y asegurar la liberación de decenas de rehenes, y un posible acuerdo se considera la mejor esperanza de evitar un conflicto regional aún mayor. Hamas, que no participó directamente en las conversaciones, acusa a Israel de añadir nuevas exigencias a una propuesta anterior que contaba con el apoyo de Estados Unidos y de la comunidad internacional y con la que Hamas había estado de acuerdo en principio.
Ambas partes han acordado en principio el plan que anunció el presidente Joe Biden el 31 de mayo, pero Hamás ha propuesto enmiendas e Israel ha sugerido aclaraciones, lo que ha llevado a cada parte a acusar a la otra de intentar frustrar un acuerdo.
Hamás ha rechazado las demandas de Israel, que incluyen una presencia militar duradera a lo largo de la frontera con Egipto y una línea que divida Gaza en dos, donde se registraría a los palestinos que regresan a sus hogares para erradicar a los militantes.
Este viernes, los mediadores dijeron que presentaron una propuesta de transición a ambas partes coherente con el plan presentado por Biden. Esta propuesta se basa en áreas de acuerdo y cierra las brechas restantes, lo que permite una rápida implementación del acuerdo.
El nuevo impulso para poner fin a la guerra entre Israel y Hamás se produjo cuando el número de muertos palestinos en Gaza superó los 40.000, según las autoridades sanitarias de Gaza, y los temores seguían siendo altos de que Irán y los militantes de Hezbolá en el Líbano atacaran a Israel en represalia por los asesinatos de los principales líderes militantes.
Los mediadores internacionales creen que la mejor esperanza para calmar las tensiones sería un acuerdo entre Israel y Hamás para detener los combates y asegurar la liberación de los rehenes israelíes.
La diplomacia internacional para evitar que la guerra en Gaza se propague a un conflicto regional más amplio se intensificó el viernes, con los ministros de Asuntos Exteriores británico y francés haciendo un viaje conjunto a Israel.
El ministro de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, y el ministro de Asuntos Exteriores francés, Stéphane Séjourné, parecían esperanzados después de reunirse el viernes con el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz.
Lammy dijo que los funcionarios israelíes les dijeron que esperaban estar a punto de sellar un acuerdo.
“Ahora que nos acercamos a los 315 días de guerra, es hora de llegar a un acuerdo para que los rehenes sean devueltos, para que la ayuda llegue en las cantidades necesarias a Gaza y para que cesen los combates”, dijo Lammy.
Junto a él, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Stéphane Sejourne, calificó de inaceptable cualquier acción que desestabilice las negociaciones. Él y Lammy habían enviado mensajes muy claros a todas las partes de que este era un momento clave "porque podría llevar a la paz o a la guerra", dijo.
Katz dijo en una declaración que le dijo a sus homólogos británico y francés que si Irán ataca a Israel, Israel espera que sus aliados no solo lo ayuden a defenderse, sino que se unan para atacar a Irán.
También advirtió a Irán, que respalda a Hamás, Hezbolá y los rebeldes Houthi en Yemen, todos los cuales han atacado a Israel desde que comenzó la guerra de Gaza, que detenga los ataques.
"Irán es la cabeza del eje del mal, y el mundo libre debe detenerlo ahora antes de que sea demasiado tarde", dijo Katz en X.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, calificó las conversaciones como un paso importante. Dijo que queda mucho trabajo dada la complejidad del acuerdo y que los negociadores se estaban centrando en su implementación.
La guerra comenzó cuando militantes liderados por Hamas irrumpieron en la frontera fuertemente custodiada el 7 de octubre, matando a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y Israel secuestró a 250 personas y las llevó a Gaza. Más de 100 fueron liberados durante un alto el fuego de una semana en noviembre y se cree que alrededor de 110 siguen dentro de Gaza, aunque las autoridades israelíes creen que alrededor de un tercio de ellos están muertos.
La devastadora ofensiva de represalia de Israel ha matado a 40.005 palestinos, dijo el jueves el Ministerio de Salud de Gaza, sin decir cuántos eran militantes. El portavoz militar de Israel, el contralmirante Daniel Hagari, dijo el jueves que Israel había matado a más de 17.000 militantes de Hamás en Gaza en la guerra, sin proporcionar pruebas.
Los diplomáticos esperaban que un acuerdo de alto al fuego persuadiera a Irán y al Hezbolá del Líbano a posponer las represalias por la muerte de un alto comandante de Hezbolá en un ataque aéreo israelí en Beirut y del principal líder político de Hamás en una explosión en Teherán de la que se atribuyó ampliamente a Israel.
Kirby dijo que Irán ha hecho preparativos y podría atacar pronto con poco o ningún aviso, y que su retórica debería tomarse en serio.
VOA/ doh
