Romane Hourcastagnou, de 23 años, murió después de sufrir una caída mil metros, la joven se lanzó desde una avioneta, el paracaídas no le funcionó y lamentablemente terminó contra el suelo.
La joven francesa saltó y no se percató que había un problema con su paracaídas y aunque intentó realizar una maniobra de emergencia, la velocidad y la altura no le permitieron salvarse.
Sus compañeros se dieron cuenta de la situación una vez tenían abiertos su paracaídas. Lamentablemente, tuvieron que observar la tragedia con impotencia y desesperación.
"El impacto contra el suelo fue muy violento", comentó uno de los testigos.
La joven llevaba practicando este deporte desde hacía un año y había realizado más de 100 saltos, de acuerdo con Roland Ilyes, director técnico del Centro Regional de la Escuela de Paracaidismo de Alsacia.
Fuente:NYPost/Foto:Archivo/abv
