La cantante Ariana Grande demandó a Forever 21 por 10 millones de dólares, acusando a la tienda de ropa y a una compañía de belleza iniciada por las hijas de los fundadores de aprovecharse de su fama e influencia para vender sus productos.
La demanda fue presentada el lunes, en donde la cantante acusa a Forever 21 y a la firma de belleza Riley Rose de apropiarse indebidamente de su nombre, imagen y música, incluso mediante el empleo de una modelo “sorprendentemente similar” en un sitio web y en una campaña en redes sociales a principios de este año.
Grande dijo que esto sucedió luego de un fracaso de conversaciones de febrero para crear una campaña de marketing conjunta debido a que Forever 21 no le pagaría lo suficiente.
La demanda de la cantante en una corte federal de Los Ángeles busca compensación de daños por infringir derechos de autor y marca registrada, falso respaldo y por violar su derecho a la publicidad.
Fuente: Excélsior/Foto:Archivo/abv/JAC
