El uso de las redes sociales parece ser la forma de comunicación que llegó para quedarse, cada vez son más las opciones para establecer contacto, conocer nuevos amigos o simplemente compartir y dejar un registro de lo que se hace día a día, sin embargo, todo esto que parece una herramienta útil para la vida diaria, puede llegar a ser un mal que poco a poco se va adueñando de generaciones que, sin saberlo, se vuelven adictos del famoso mundo virtual.
Podemos hablar de adicción a las redes sociales cuando el utilizarlas representa una pérdida de control, absorción a nivel mental, así como una alteración importante en el funcionamiento diario de la persona.
El abuso en las redes sociales puede ser un camino fácil y rápido al aislamiento, bajo rendimiento, desinterés por el entorno o simplemente cambios de conducta como la irritabilidad, sin dejar de lado el sedentarismo o las alteraciones del sueño.
La adicción puede confirmarse cuando su uso es abusivo y descontrolado, llegando a provocar síntomas de abstinencia como la ansiedad, depresión o intranquilidad, todo esto cuando se pierde la conexión y no hay manera de estar activo en la red.
Si bien todo el mundo está expuesto a las redes sociales, los adolescentes son los principales atacados ya que son los que más utilizan el internet.
Todos estos problemas ocasionados por el uso excesivo de las redes sociales pueden provocar una seria pérdida en el intercambio personal de la comunicación, así como terminar en un “analfabetismo relacional” además de promover la construcción de relaciones sociales ficticias.
Cabe señalar que el Consejo de Ministros en España incluyó por primera vez a las adicciones sin sustancias como las nuevas tecnologías, juegos online y videojuegos, dentro de la Estrategia Nacional de Adicciones. Se estima que hasta el 18% de los jóvenes entre 14 y 18 años usa de manera abusiva las nuevas tecnologías, según el reporte anunciado por Francisco Babín, delegado del Gobierno.
Fuente: El País/Foto: Archivo/Dac
