La Plaza de Mayo albergó hoy un velorio colectivo, en el que miles de personas lloraron la muerte de Santiago Maldonado, un joven de 28 años desaparecido durante una represión policial, para quien se exigió justicia.
En una mezcla de tristeza e indignación, los manifestantes aprovecharon para exigir la renunciar de la ministra argentina de Seguridad, Patricia Bullrich, quien siempre defendió a la Gendarmería, el cuerpo que realizó el operativo que terminó con la desaparición y muerte del joven activista.
También pidieron una respuesta por parte del presidente Mauricio Macri, ya que desde que Maldonado desapareció el 1 de agosto pasado en una comunidad mapuche de la Patagonia, evitó hablar del tema.
Las rejas del monumento de la Plaza de Mayo se colmaron de mensajes a Maldonado y promesas a su familia de que seguirán luchando con ellos para que los responsables de su muerte no queden impunes.
“Queremos justicia para nuestro hermano Santiago”, “Resistencia no es terrorismo”, “Justicia por Santiago, el Estado es responsable”, “Santiago Maldonado, con vida lo queríamos” y “Acá no se rinde nadie” fueron algunos de los letreros escritos a mano y pegados en un altar improvisado.
“Encubrimiento al alcance de sus ojos, Gendarmería Nacional asesina, gobierno cómplice”, rezaba una larga pintada en uno de los edificios que rodean la Plaza.
Organismos de derechos humanos y partidos y organizaciones de izquierda fueron los principales convocantes a una manifestación en la que destacaron ciudadanos sin militancia que sólo querían compartir su tristeza y solidarizarse con la familia.
El cuerpo de Maldonado se encontró el martes pasado, 78 días después de haber desaparecido, aunque la familia confirmó la víspera su identidad.
La tensión social provocada por el caso se tradujo en inmediatas y espontáneas movilizaciones a la morgue en donde se encontraba el cuerpo, la Plaza de Mayo y la residencia presidencial de Macri.
El caso que conmocionó a los argentinos tuvo una repercusión internacional que se reflejó en las declaraciones del presidente de Bolivia, Evo Morales; la exmandataria de Brasil, Dilma Roussef, y Naciones Unidas.
“Lamentamos muerte de Santiago Maldonado, nuestras condolencias a familia y pueblo argentino. Que cobarde y condenable asesinato se esclarezca”, escribió Morales en su cuenta de la red social Twitter.
Rousseff, por su parte, advirtió que “la muerte de Maldonado revuelve al continente suramericano, que no acepta el terrorismo de Estado o el ataque a los derechos humanos… los criminales tienen que ser castigados".
El titular de la Oficina para América del Sur del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Amerigo Incalcaterra, manifestó su “consternación”, expresó sus “sinceras condolencias” a la familia “en estos difíciles momentos” y convocó a que se realice “una investigación eficaz para esclarecer las circunstancias de esta tragedia".
Fuente y Foto:Notimex/JAC
